Canciones modernas

Por regla general, y al parecer para cumplir con alguna ley de Murphy, cuando enciendo el radio encuentro pura basura, desde los locutores con poco seso hasta la música comercial más hueca y sin sentido; compuesta por el mismo beat de las demás canciones actuales, sobrecargado de auto-tune y además, el único hit de ese artista.

Probablemente el problema no sean los músicos, sino la industria en sí. Si todo suena igual, cuesta mucho, tiene mala calidad y no transmite nada, tal vez nos encontremos en una curva descendiente de la evolución del rock y el metal.


La música se ha vuelto una mercancía más en está sociedad consumidora y ha dejado de ser arte, solo es un medio para ganar dinero. No tiene los elementos artísticos, técnicos y sociales que debería.



En pocas palabras, la música de hoy, en su mayor parte, es una porquería. ¿Por qué? La respuesta es simple, por el uso inadecuado de elementos y recursos musicales, contenido repetido, y sobretodo tratarla como un simple y vil producto más.

Dejemos de lado la idea de si es X o Y artista, no entremos en el debate de géneros musicales ni de gustos personales. Si bien existen algunas bandas que tienen buen material, que son pocas, utilizan los elementos clásicos de la música de las décadas de los 80.

¿Qué hace buenas a canciones cómo Smoke on the Water, Hells Bells, Master of Puppets o a The Trooper? Diferentes artistas, años, técnicas y sobretodo colores y sonidos. ¿Qué tienen en común?
Su solidez depende de su estructura y mensaje, nos cuentan una historia, tienen una idea clara; cambios de tiempo y solos increíbles.

Hoy, mientras los estudios apuestan por el Pro tools y el auto-tune, podemos ver como buenas canciones están hechas para sonar mal. Instrumentos con volumen alto y mal mezclados, voces olvidadas en la parte más lejana de la pista. Canciones hechas con 3 frases bobas y pegajosas. Punchis punchis utilizado en 180mil canciones diferentes (parece increíble que utilicen el mismo archivo y solo lo modifiquen). ¿Qué pasa en la industria?

Primero mueven leyes para evitar las descargas, cosa que dependiendo de ciertos factores puede ser visto como bueno pero la forma es muy mala (después entraremos en detalle), después nos venden a banditas, y más bien una imagen, con música mala y mal grabada y para terminarla de.... nos traen cosas que no pueden tocar o cantar en vivo.

En cuanto a las letras, encontramos una pésima calidad en más del 80% de la música moderna. En dónde quedaron las letras con sentido. Con ello me refiero a las letras que buscaban compartir un mensaje, una crítica social, una protesta, aquellas letras que denunciaban abusos y censuras. Las ideas de hoy en día, por desgracia, hacen que los mensajes sean superficiales, todo habla de desamores.

El ejemplo más claro lo tenemos en la música en español. Así es, en mi opinión, es uno de los factores que llevan a la música a su perdición. No lo digo en general claro está. Existen buenas bandas que cantan en español. Algunas solamente tiene 2 ó 3 canciones buenas.

El problema no es el idioma, quiero aclarar. La lengua castellana es magnífica, nos permite expresar a detalle y con claridad todo lo que sentimos, pero al parecer muchos escritores de canciones no tienen la más mínima noción de como usar su lengua.

Finalmente hablemos de la calidad. Muchas veces las canciones terminan siendo un monstruo de parches de diferentes tomas. Las canciones no transmiten energía, no se sienten, crecen de algo que las haga ser fuertes, ese "algo" desconocido que hace que una canción se quede en la mente por años.

Con los adelantos tecnológicos la música debería ser mucho mejor de lo que es. Por supuesto que me refiero al rock y metal. Existen muy buenos músicos en Latino América, pero... ¿Por qué terminan sonando todos igual? (Añadiría signos de exclamación a la pregunta pero la RAE me colgaría)

Las voces e instrumentos, sin importar países, equipos, géneros ni gustos musicales de los integrantes de una banda, ¡Siempre terminan sonando igual!

Parece que la industria en Latino América solo busca llegar a ciertas partes de la población, por cierto con precios excesivos (asunto que discutiremos próximamente) con material sencillo, bobo, mal grabado y producido.

En conclusión, si la música fuera vista, no como una mercancía, sino como el medio para llevar un mensaje a mucha gente, sin dejar de ser arte, el panorama actual sería diferente.

No digo que copiemos los ejemplos de la música en inglés, con ritmos duros y consistentes y solos técnicos y espaciales, pero podemos aprender de ellos. Tomar la corriente de la vieja escuela y adaptarla al momento en el que nos encontramos.